En el marco de una entrevista en CNN Tiempo, la doctora © en Geología UCN e investigadora CIGIDEN, Francisca Roldán, se refirió a las características de este evento en 2015 y las lecciones aprendidas.
El aluvión ocurrido entre el 24 al 27 de marzo de 2015, afectó principalmente a la ciudad de Chañaral y las localidades aledañas. Tres días de intensas lluvias -siendo el día 25 de marzo el más intenso- provocaron la activación de dieciocho quebradas, cuya consecuencia fue un aluvión sin precedente en la zona.
Según la doctora © en geología UCN e investigadores del Centro de Investigación para la Gestión Integrada del Riesgo de Desastres (CIGIDEN) Francisca Roldán, los factores que potenciaron la amenaza de aluvión, tienen que ver con las características geológicas de nuestro país, que es altamente montañoso. “Tenemos un área de captación de aguas lluvia de 7.000 kilómetros cuadrados. Es decir, estamos hablando de más de 68.000 canchas de fútbol con captación de agua y que drenan directamente hacia Chañaral”, explicó en entrevista con CNN Tiempo el lunes 25 de marzo de 2024.
“Recordemos que los aluviones es una mezcla entre sedimento y agua lluvia, y que por efecto de la pendiente, va bajando por distintos cauces o quebradas, hacia zonas más bajas”, detalló Roldán. Esto coincidió con las localidades de Diego Almagro en la zona central y Chañaral en la parte oceánica, justamente donde se alojó la mayor cantidad de material generado por los deslizamientos.
A juicio de la investigadora CIGIDEN, en Chile tenemos pocas estaciones pluviométricas, lo que afecta el registro de datos que nos permitan prever y gestionar una amenaza de índole hidrometeorológica, como es un aluvión.
Asimismo, Roldán explica que este fenómeno difiere de eventos como el aluvión de la Quebrada de Macul en 1991 y el de Antofagasta en 1993, ya que para 2015, existían muchas más herramientas a diferencia de los 90 ‘s. “En Chañaral se levantó la alerta de evacuación de manera temprana, avisando con bastantes días de anticipación y a la gente que seguía en sus hogares”, comentó.
La científica recalcó que los desastres no son naturales, sino que socionaturales, ya que en ellos confluyen distintos factores meteorológicos, geológicos y también decisiones relativas a la estructura urbana, por lo que aprovechó de hacer hincapié en la toma de decisiones respecto a cómo organizar la habitabilidad de un territorio.
Revive la entrevista de Francisca Roldán en CNN Tiempo acá