Carolina Martínez, Alondra Chamorro y Magdalena Vicuña, son investigadoras principales del Centro de Investigación para la Gestión Integrada del Riesgo de Desastres (CIGIDEN) y en el marco del Día Internacional de la Mujer, comparten sus reflexiones en torno a la relevancia que cobra la participación femenina durante un desastre socionatural y también en los procesos de reconstrucción.
Según datos de la Asamblea General de las Naciones Unidas (UNESCO) las mujeres representan solo a un 33,3% de los investigadores, y solo el 35,5% de los estudiantes de carreras relacionadas con las STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) son mujeres.
En este sentido, la subdirectora de CIGIDEN y académica de Ingeniería UC, Alondra Chamorro, destaca el rol destacado de las y los educadores, en términos de guiar el camino profesional de las niñas y adolescentes que en el futuro quieran dedicarse a la ciencia. “Si no tienes alguien que te ayude a mirar de otra forma las cosas, van a existir más sesgos ¿Cómo llegamos a esas niñas que quizás ya vienen con el sesgo desde la familia o desde los mismos educadores?”, plantea la experta.
Alondra Chamorro, señala que en la ciencia, como en particular en la Gestión del Riesgo de Desastres, es fundamental una mirada más diversa y transversal, dada la necesidad de elaborar estudios interdisciplinarios. “Creo que el aporte de la mujer tiene que ver con una mirada más holística de los problemas y no solamente en un área específica”, puntualiza.
El rol de la mujer durante la emergencia
Carolina Martínez es académica de Geografía UC, directora del Observatorio de la Costa UC e investigadora principal de CIGIDEN, espacio desde donde comenzó a impulsar la Ley de Costa para Chile.
Recientemente y en el marco de los incendios que afectaron a la Región de Valparaíso los primeros días de febrero, la investigadora vivió en carne propia el inicio de las llamas. El día 5 de febrero ya estaba en terreno, liderando a un equipo de profesionales de CIGIDEN con la finalidad de levantar datos y realizar un informe que permita avanzar en la respuesta ante el desastre.
“Fue una experiencia bastante ruda por todo lo que nos tocó ver y escuchar de las personas que vivieron esta experiencia y que tuvieron la generosidad de compartir sus vivencias con nosotros. La reducción del riesgo de desastres se ha convertido en un tópico de gran relevancia, ya que las amenazas de origen natural son cada vez más intensas”, explica Martínez.
A raíz de su experiencia en terreno, comenta que “hasta hace una década, las mujeres eran más bien invisibilizadas en su rol social para la resiliencia comunitaria, pro que hoy son agentes fundamentales para transformar y empujar los procesos de reconstrucción y las salidas rápidas también de las etapas y las fases de la emergencia”.
De hecho, indica que son las mujeres las primeras en gestionar alimentos, vestuario, liderar los centros de acopio y las ollas comunes. No obstante, recalca que “falta impulsar políticas públicas para poder desarrollar los talentos y las capacidades que tienen las mujeres en todo ámbito.
Asimismo, hace un llamado al Estado para que motive la inserción de las mujeres en la ciencia y especialmente, su rol dentro de las políticas públicas, para lograr una sociedad más resiliente y sostenible. “Tenemos un rol importante en construir una sociedad mucho más integrada, mucho más conectada con la naturaleza, mucho más solidaria y ahí principalmente el rol de la mujer cobra principal importancia”, asegura la geógrafa UC.
Científicas, madres y cuidadoras
Por su parte, la investigadora principal de CIGIDEN y académica del Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales UC, Magdalena Vicuña, también recalca el protagonismo de las mujeres antes, durante y después de un desastre.
Vicuña ha dedicado su investigación en torno a una planificación urbana resiliente y sostenible. A partir de esta experiencia, recalca que son las mujeres quienes cumplen una labor importante, por ejemplo, en los comités de vivienda. “Esa empatía de género que tenemos con estos agentes centrales para la Gestión del Riesgo de Desastre (GRD) es fundamental y por eso necesitamos más mujeres en la ciencia y en GRD”, asegura.
Según la arquitecta UC, hoy se estarían dando las condiciones adecuadas para que sean las mujeres quienes lideren proyectos, sin embargo, aún hace falta una cultura más paritaria y en torno a lo que significa el cuidado de otros, el que mayoritariamente descansa en las mujeres.
“Las mujeres científicas también somos mamás, también cuidamos a nuestros padres, a nuestras madres y además de nuestra labor científica, que es sumamente competitiva,, tenemos labores de cuidado muy demandantes. Para que más mujeres podamos seguir el camino de la ciencia, como sociedad tenemos que asumir entre todas y todos las labores del cuidado”, advierte.