La inauguración se realizará el viernes 31 de enero, a las 12:00 horas, en la oficina de Senapred (Av. Beauchef 1671) y estará abierta al público hasta el 14 de marzo.
Después del incendio invita al público a reflexionar y conectar desde la sensibilidad del arte con la compleja realidad de los incendios en Chile. La exposición gira en torno a tres ejes temáticos que exploran el encuentro con el fuego, la resiliencia ante las llamas y los aprendizajes que emergen de estas tragedias, poniendo de manifiesto la fragilidad de lo irrecuperable, las resistencias que perduran y las formas de reconstrucción hacia un futuro más sostenible.
La muestra reúne obras consolidadas y nuevas creaciones desarrolladas durante un proceso de residencia artística en las dependencias de SENAPRED, reflejando la interacción entre el arte y los desastres socio-ambientales en Chile. Entre las piezas ya consolidadas destaca el trabajo de Alicia Villarreal Mesa, reconocida con el Premio Artista Mujer (PAM) 2024, quien presenta Reinventar el territorio, un proyecto que indaga en las huellas de los incendios en el sur de Chile, específicamente en las reservas China Muerta en La Araucanía y Los Ruiles en el Maule, donde los desastres de 2015 y 2017 dejaron profundas marcas. A través de mapas realizados a mano y videos, Villarreal aborda la pérdida de especies nativas y las formas comunitarias de reconstrucción que emergen en estos contextos. Por su parte, Meliza Luna Venegas presenta Tala, una serie de obras que explora la memoria y la resistencia territorial frente al impacto ambiental de los incendios provocados por el extractivismo, proponiendo una reflexión sobre la relación entre destrucción y territorio.
Entre las nuevas propuestas destaca la fotoperformance de Rocío López Montaner titulada Perspectivas múltiples de un acontecimiento, que documenta la construcción y quema de una estructura de madera, invitando a cuestionar las narrativas asociadas a tragedias como la de Santa Olga en 2017. Ignacio Gutiérrez Crocco presenta Nos quemaron, una instalación inmersiva que, mediante espejos, proyecciones y audios, recoge los relatos de comunidades afectadas por incendios, explorando las interpretaciones de intencionalidad que surgen tras estos desastres. Sebastián Riffo Valdebenito, por su parte, exhibe Hálitos ígneos, una propuesta que combina pintura y videoperformance para recorrer simbólicamente el barrio Yungay, un espacio marcado por incendios históricos, tomando como base archivos de prensa y configurando una mirada poética y crítica.
La exposición, producida por DESARTES, la Unidad de Artes y Desastres de CIGIDEN, en colaboración con SENAPRED, representa un esfuerzo colectivo por entrelazar arte, desastre y resiliencia, ofreciendo una experiencia transformadora que invita a reflexionar sobre el impacto del fuego y las posibilidades de reconstrucción en Chile.