Por Rosita Jünemann, investigadora CIGIDEN y académica del Departamento de Ingeniería Estructural y Geotécnica UC junto a Jorge León, investigador principal CIGIDEN y académico del Departamento de Arquitectura USM.
Desde el Centro de Investigación para la Gestión Integrada del Riesgo de Desastres (CIGIDEN) llevamos más de diez años impulsando investigación de frontera para comprender y evaluar el riesgo y la resiliencia ante desastres causados por eventos naturales, contribuyendo a la creación de territorios más seguros y mejor preparados. A lo largo de este proceso, también nos hemos enfocado en generar herramientas que no solo contribuyan al conocimiento científico, sino que además puedan ser un insumo para los tomadores de decisión. Como resultado, hoy disponemos de una serie de plataformas computacionales que integran y ponen a disposición este conocimiento para diversos tipos de usuarios, quienes son actores clave en el proceso de reducción de riesgo de desastre. Estos desarrollos tecnológicos han surgido del trabajo colaborativo entre investigadores de distintas disciplinas, organismos del estado y comunidades que se vinculan gracias a este Centro de Excelencia.
Contribuir a la Gestión del Riesgo de Desastres, a través del uso de tecnologías que permitan agilizar la toma de decisiones, es uno de los impulsos para trabajar en cada una de estas plataformas que cumplen un rol específico. Entre las más relevantes está ASISTE (Análisis Sismo-Tsunami-Evacuación) que considera tres componentes: la amenaza sismo y/o tsunami, la exposición a una amenaza y la vulnerabilidad ante ella. Esta herramienta aporta a la planificación territorial de manera más precisa, entendiendo el entorno construido que está expuesto, considerando modelos de evacuación, estimando así los tiempos de respuesta considerando rangos etarios.
También contamos con el proyecto del Fondo de Innovación para la Competitividad Regional FIC-R, “Plataforma para la evaluación del riesgo de desastres socionaturales en el Gran Valparaíso” el cual analiza escenarios de multiamenazas tales como incendios, remociones en masa, terremotos, tsunamis; entre otras, y cómo estas interactúan con los procesos de expansión urbana (formal e informal) en el territorio. Este proyecto está siendo desarrollado en conjunto con el Gobierno Regional de Valparaíso, quien convocó a un grupo de investigadoras e investigadores del Centro para co-crear esta herramienta, lo cual nos llena de orgullo al saber que más tomadores de decisión confían en nuestro trabajo.
Podemos también mencionar el proyecto SIGMA, cuyas siglas significan “Sistema de Información Geográfica de Multimenaza”, el cual concatena el esfuerzo en el levantamiento de información para tener una mayor visión de cuencas, como la del Río Maipo, y así realizar una reconstrucción espacial de todas las amenazas que están presentes, las cuales afectarían a más de siete millones de personas. SIGMA genera un catálogo unificado de las amenazas de origen natural para también aportar a la planificación territorial.
Y por último, y no menos importante de presentar, debemos destacar los esfuerzos por la construcción de la plataforma computacional SimPlaNer (Simulation Platform for Network Resilience), única en el mundo, que permite simular cómo reaccionaría el sistema de salud ante un terremoto. Esta tiene como objetivo principal ayudar a los hospitales a prepararse ante emergencias, identificando los puntos críticos incluidos el comportamiento de los pacientes.
Por esto, en el Día Internacional de la Reducción del Riesgo de Desastres, el cual se celebra cada 13 de octubre desde 1990, fecha proclamada por la Asamblea General de las Naciones Unidas, debemos seguir mejorando nuestra capacidad de respuesta y preparación ante eventos disruptivos. Más aún cuando a nivel mundial se está presenciando la ocurrencia de un mayor número de amenazas naturales de gran magnitud, como el Huracán Milton.
En un contexto de cambio climático, donde surgen y se intensifican nuevas amenazas, el entorno construido también se transforma debido a patrones de urbanización y crecimiento acelerado, formal e informal, incrementando la vulnerabilidad de los territorios. La reciente creación de SENAPRED como la nueva institucionalidad en la gestión del riesgo de desastres refleja la necesidad urgente de adaptarse a estos desafíos. Todos estos factores subrayan la relevancia del trabajo que realizamos en CIGIDEN, donde la investigación y el desarrollo de herramientas tecnológicas se vuelven esenciales para apoyar la toma de decisiones y fomentar la resiliencia ante desastres.
Estos factores hacen que el aporte científico y tecnológico que desarrollamos sea cada vez más necesario, y nos impulsan a seguir avanzando en la generación de conocimiento y herramientas que contribuyan a un futuro más resiliente y seguro.